«No otra vez»: a 80 años de Hitler

  • La profesora de la UNAM, Annita Eileen, dijo que esta fecha debe recordarse para que en ningún sitio vuelva a destruirse la «diversidad social» 

Por Perla Velázquez (@_Pixie_Pearl)


CIUDAD DE MÉXICO, México, (N22).- 
Hace 80 años Paul von Hindenburg nombró a Adolf Hitler canciller y encargado
del Reich. Este suceso histórico marcó un hito dentro de la comunidad alemana.
El ansia de poder y la forma dictatorial del Führer alemán no se vislumbraron al llegar al gobierno el 30 de enero
de 1933. Annita Eileen Mutzwelti, profesora de la FES Acatlán, recordó en
entrevista lo que sus abuelos le contaron sobre cómo se vivió esa época.

“En ese momento Alemania tenía
una crisis descomunal, factor que influyó para que Hitler ascendería al poder. Esta
ansia de poder hizo que les vendiera a los alemanes de que el país sería la
gran potencia. Esa fue una de las razones por las cuáles posteriormente fuera
invadiendo los países europeos”, afirmó Eileen.

Bajo el sistema parlamentario de
la República de Weimar el país no lograba crear una mayoría estable, y Hitler,
con un discurso simplista logró la adhesión de millones de desempleados y
pequeños rentistas arruinados por la crisis económica.

En el discurso para recordar
este hecho histórico, la canciller Angela Merkel recordó que en tan sólo seis meses
Hitler aplastó toda la diversidad de la sociedad, quienes en ese entonces
apoyaron o “al menos toleraron al régimen hitleriano. El ascenso del nacional-socialismo
fue posible porque las élites y amplios sectores de la sociedad alemana
participaron en él», señaló.

Anita Eileen considera que en esta
fecha, México y las demás naciones, deben de recordarla como la propia Alemania
lo hace: “No otra vez. Ellos tienen que analizar con mucho cuidado qué grupo
toma el poder y ser más prudentes ante esto. Alemania aprendió de ese momento,
de querer la igualdad social”.

Por su parte, en la ex sede de la
Gestapo -la policía secreta nazi-, donde ahora es un espacio de exposición al
aire libre, Merkel pronunció que esto constituye una “advertencia permanente” para
recordar que la democracia y la libertad no se imponen por sí mismos. “La
libertad no es algo natural y la democracia no es evidente”, afirmó.

A pesar de que los alemanes no
excluyen el tema y deciden afrontarlo para asegurar un futuro estable, la
nación recuerda que hace 80 años comenzó el capítulo más oscuro de su vida.
Anita Eileen rememora que sus abuelos le explicaban que en esa época murió
muchísima gente, pero que también hubo muchas obras arquitectónicas.

“Esta situación acarreó al mundo
muchas desgracias, especialmente a Alemania, porque este país perdió ciudadanos
y también en la situación hubo esta desconfianza: en no creer ni en el hermano,
porque se pensaba que él iba a acusar a su propia sangre si no se unía a la
dictadura”, comentó.

Para conmemorar el 80 aniversario
de la llegada de Adolf Hitler al poder, Alemania montó la exposición Diversidad destruida: Berlín 1933-38 en
el Museo Histórico Alemán, en donde se explica cómo se destruyó la diversidad
social y la vanguardia cultural en el Berlín de la década de 1920 con el
establecimiento del nacionalsocialismo.

“Creo que no debemos de destruir
al prójimo como sucedió en esa época. Este tema es muy difícil de tratar porque
existe gente que aún está sufriendo las consecuencias de eso”, finalizó
Eileen. 

Otra actividad que se tiene
prevista es la reedición de Mein kampf (Mi lucha) dentro de dos años, libro
escrito por el propio Hitler.
13MAG 

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