En Rough and Rowdy Ways una atmósfera silenciosa, en calma e incluso nostálgica, creada por cuerdas apagadas, pedales suaves y guitarras clásicas, permea todo el álbum
Ciudad de México (N22/Redacción).- Bob Dylan, Premio Nobel de Literatura y autor de 39 álbumes de estudio, comenzó su carrera musical en la década de los 60 y desde entonces no ha dejado de contar historias a todas aquellas personas que deciden inmiscuirse en las profundidades de su voz. Una voz a veces desgarradora, sin aliento, inescrutable, e incluso profética. Sus palabras han formado, por sí mismas, un universo que sólo puede ser comprendido por aquellos que logran encontrar la totalidad de su música con el significado poético de sus canciones.
No obstante, el silencio en Dylan también adquiere significado, o por lo menos eso se percibe una vez que uno escucha su último disco, titulado Rough and Rowdy Ways, el cual, bien puede formar parte de una trilogía en conjunto con los dos discos que le preceden.
Una atmósfera silenciosa, en calma e incluso nostálgica, creada por cuerdas apagadas, pedales suaves y guitarras clásicas, permea todo el álbum, lo cual crea una antítesis en comparación con el título del disco. Aunado a ello, Bob Dylan revela, desde la primera canción, que este disco bien puede ser una exposición de un lado más sincero del cantautor, Dylan escribe «i’ll show you my heart (te mostraré mi corazón)» , y durante todas las canciones, se dedica a hablar, e incluso susurrar, sobre sí mismo.
No obstante, el álbum es suficientemente amplio, (tiene una duración de 1 hora con 10 minutos) para dar pie a otros temas, por ejemplo, la emblemática canción cuyo referente principal es el monstruo Frankenstein, titulada “My Own Version of You”, la cual muestra una narrativa un tanto macabra, oscura y hasta cierto punto funciona como una comedia existencial en donde Dylan busca crear a “su propia versión de ti” (baste preguntarse si habla de sí mismo) en donde se cuestiona «Can you tell me what it means, to be or not to be? (¿puedes decirme qué significa ser o no ser?». ¿Esta canción es acaso, como ya es costumbre en el cantautor, una crítica de sí mismo o de toda la humanidad? ¿Acaso no el Eterno Prometeo criticó a la sociedad de su tiempo?
El álbum finaliza con “Murder Most Foul”,canción previamente lanzada en forma de sencillo, y la cual tiene una duración de 16 minutos con 54 segundos, lo que la convierte en la más larga de todo el álbum. Dicha canción, narra, con una voz silenciosa y apenas perceptible el asesinato de John F. Kennedy. Dicha canción se convirtió en una de las más escuchadas durante el 2020.