Angeología: metáfora de la lucha entre utopías

Por Nuria Ocaña
Ciudad de México, 09/12/14, (N22).- Mientras el socialismo soviético, incluido su arte,
proclamaba por el esquema de trabajo horizontal de la comunidad, el arte
contestatario de Ilya y Emilia Kabakov reclamaba la realización del hombre a través
de su trabajo individual. Esto es la utopía del sistema comunista frente a la
utopía del ascenso individual.
El mensaje de estos artistas rusos retoma la
expresión filosófica de la cultura que designa el ser esencial del hombre y su
medida de ascensión, sintetizando toda su producción humana material y
espiritual. Pero toda ascensión experimenta una caída.
Con Angeología,
los Kabakov llenan las salas del San Ildenfonso de analogías y metáforas entre
los ángeles y el trabajo creativo, mostrando la creatividad como un proceso más,
producto del entrenamiento. “La excelencia es un hábito”, dijo Aristóteles, y
los Karakov señalan los pasos a seguir, en el entendido de comprender la
excelencia como sinónimo de creación.
Así, los ángeles son el símbolo, y con una mezcla de
técnicas y formas utilizadas por el régimen soviético, los Karbakov también
aleccionan al público sobre el correcto método de su transformación individual.
La pieza “Cómo puede cambiarse uno mismo” por ejemplo, utiliza un tablero como
réplica de los formatos que utilizaban en la Unión Soviética para difundir
información sobre el comportamiento debido de los ciudadanos; allí los Karbakov
sitúan unas alas atadas a un arnés y describen cómo es que este dispositivo
transforma a la persona que lo usa, al menos en su mente.
Sin embargo, no es tan simple. Las vidas de Ilya y Emilia
atraviesan por una coyuntura con su trabajo  
-como casi todos los artistas- cuando huyeron de un país que limitaba su
potencial artístico bajo un sistema represor; son una pareja de emigrantes. “Nadie
se va de su país porque le guste vivir en él”, respondió Emilia en una
entrevista para The New Yorker y
viene entonces el desplome del ángel. Esa búsqueda de modelos utópicos sociales termina por experimentar su ruina cuando despierta y descubre las
condiciones materiales reales de existencia.
“De 1987 a 2000 experimentamos
la sensación de conseguir ‘tu propia atmósfera artística’ una experiencia que estaba
muy presente en el mundo del arte (…) Era una vida y un trabajo idealista, con
posibilidades fantásticas de materializar los proyectos, las ideas, de trabajar
en museos y espacios sin fines de lucro de todo el mundo. Después de 2000 el
mundo del arte cambió drásticamente, y de alguna manera desaparecieron todas
las fantasías”, dijo Emilia para TNY.
Por ello es que finalmente, en la vida de
estos emigrantes y dentro de la muestra, existe la presencia
reiterada de objetos que emanan el aura de lo doméstico y lo cotidiano con la intención
de reconciliar a los hombres consigo mismos, estableciendo un balance entre sus
sueños y la vida real.
Angeología
permanecerá abierta al público hasta el 11 de enero del 2015 en el Antiguo
Colegio de San Ildelfonso.

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