La política mató a la vanguardia artística

  • Si bien estas vanguardias están enmarcadas en su época, Jorge Juanes reflexiona sobre un presupuesto: el impacto que ha tenido la razón instrumental, tecnificada, sobre la sensibilidad artística. Juanes piensa en el arte conceptual radical, donde la idea lo es todo.

Por Víctor Gaspar

Ciudad de México, 09/02/16, (N22).- v“Como una
revolución estética dentro de la revolución política pero ligadas ambas”. Así definió
el filósofo Jorge Juanes López a las vanguardias ruso-soviéticas que también
son parte de un proceso histórico por cuestionar el arte ante la modernidad
técnica.
“Llega el
momento en que la
vanguardia política destruye a la vanguardia artística. Esto sucede en Rusia,
sucede en Alemania, sucede de alguna manera en Italia. Es la primera muerte del
arte por parte de la política y de los totalitarismos
estatales frente a los portadores de la emancipación y de la libertad que está encarnada en las proposiciones de la vanguardia artística”, explicó
el filósofo.
Es precisamente el poder Estalinista el que
destruye las vanguardias ruso-soviéticas, las cuales, no se reivindicarán sino
hasta las décadas de 1970 y 1980.
“El arte no es
el arte por el arte,  es el arte que se ve a sí mismo, se autofunda, se pone como reserva de la transformación y de la relación de
los hombres entre sí y con la naturaleza. Como alternativa a otro tipo de fundamentaciones que contienen una relación de dominio y
de poder, cosa que el arte no tiene”.
Si bien estas
vanguardias están enmarcadas en su época, Jorge Juanes reflexiona sobre un
presupuesto: el impacto que ha tenido la razón instrumental, tecnificada, sobre
la sensibilidad artística. Juanes piensa en el arte conceptual
radical, donde la idea lo es todo.

“Si es idea,
está eliminando la forma sensible. Y se usan las formas sensibles como soporte
de ideas, y lo que importa es la idea y no la forma sensible. Desde ese momento
lo que se está imponiendo es un antropocentrismo racionalista, un
logocentrismo, y precisamente se elimina la cualidad, ahumaba, ontológica, que
no es del hombre ni le corresponde, que es la dimensión de la materialidad, que
a su vez es la dimensión de la sensibilidad. Y eso pasa mucho en el arte
contemporáneo desgraciadamente”.


Las vanguardias ruso-soviéticas, revolución
en la revolución,
es una publicación del Instituto Nacional de Bellas Artes.
Imagen:http://bit.ly/1nWl7mK
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