La controvertida terapia con calor infrarrojo

Redacción/CDMX

¿Te imaginas someterte a una terapia con luz infrarroja? Investigaciones recientes han revelado que este tratamiento podría tener grandes beneficios para la salud y por otra parte ser dañino para las personas.

El calor infrarrojo esta ganando popularidad en saunas como en clases de ejercicios, ofreciendo beneficios que van desde aliviar el dolor crónico hasta reducir el estrés, ya que este utiliza ondas electromagnéticas para calentar objetos de manera directa, como el cuerpo y el suelo, creando así, un calor más penetrante.

La instructora titulada de Pilates y propietaria de Reforming Foundations Pilates and Wellness en Michigan, Estados Unidos, utilizó una sauna de infrarrojos con el fin de reducir los síntomas de la enfermedad de Lyme.

«Comencé a hacer pilates suave en la sauna y descubrí que me ayudaba con mi movilidad y mis articulaciones», comentó la instructora.

Fue así como incluyó la calefacción infrarroja en sus clases de Pilates, testimonios de sus alumnos informaron una mejora en el sueño, la energía, mayor concentración y una disminución del dolor en sus articulaciones.

La terapia con luz infrarroja puede tener diversos beneficios, si se ocupa adecuadamente, por lo que debe ser investigada a detalle. La luz infrarroja tiene tres longitudes de onda: cercana, media y lejana. Cada una es utilizada con diferentes fines.

La luz infrarroja cercana es utilizada con términos médicos, puede ayudar en la cicatrización de heridas y el tratamiento de la piel. Mientras que el infrarrojo lejano es más utilizado en saunas, pilates y yoga climatizada, y llega a penetrar hasta cuatro centímetros en la piel.

Los médicos consideran que esta técnica va más allá de calentar el cuerpo, e inclusive podría afectar a las células inmunitarias y otros sistemas más profundos del cuerpo.

Robert Griffin, profesor del Instituto de Cáncer Rockefeller de la Facultad de Medicina de la Universidad de Arkansas en Estados Unidos, dice que cuando cualquier parte de nuestro cuerpo se calienta, el flujo sanguíneo aumenta, esto proporciona nutrientes y oxígeno.

«Hay una gran área de investigación en medicina termal que muestra que, si se calienta todo el cuerpo uno o dos grados, se puede aumentar la inmunidad, porque es como inducir fiebre», comenta Griffin.

Un estudio reciente también reveló que la combinación entre sesiones de sauna infrarroja y la terapia cognitivo- conductual, arrojó como resultado la reducción estadísticamente en los síntomas de la depresión.

Aunque se ha demostrado que es de ayuda para aliviar el dolor crónico, mejorar la movilidad y traer beneficios a la salud mental, siempre es mejor consultar a un médico antes de comenzar cualquier tratamiento, ya que dependerá de diversos factores el resultado en cada persona.

Pavan Tankha, director médico del Programa Integral de Recuperación del Dolor de la Clínica Cleveland dice que es demasiado pronto para hacer una declaración definitiva sobre los beneficios del calentamiento por infrarrojos al tratar el dolor crónico.

«La investigación y el tratamiento son prometedores, pero carecen de pruebas realmente rigurosas», dice.

(Con información de National Geographic)