Redacción/CDMX
Un estudio liderado por investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas español (CSIC), descubrió que las bolsas al biodegradarse dejan pequeñas partículas de microplásticos, que se transfieren al abono, aumentando los niveles de toxicidad de la tierra de cultivo.
A pesar de que las bolsas cuentan con un sello verde “100% degradable”, Cinta Porte, autora principal del estudio dijo que “Se están sustituyendo las bolsas convencionales por otras más peligrosas, que supuestamente desaparecen, pero dejan en el camino una huella tóxica en el abono”.
Durante cinco años, los científicos del Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (Idaea) y el Instituto de Agroquímica y Tecnología de Alimentos (IATA) del CSIC, realizaron un estudio con células de peces cebra para analizar los compuestos tóxicos que se pueden liberar al medioambiente.
Cinta Porte mencionó sobre el estudio: «Nos sorprendió que las células expuestas a las bolsas de plástico convencional no mostraban rastros de toxicidad. Sin embargo, sí la detectamos en las biodegradables, las cuales disminuían la viabilidad de las células».
Sin embargo, fuentes del CSIC mencionan que se desconocen los aditivos que se utilizan para las bolsas biodegradables ya que están protegidos bajo patente.
(Con información de ABC)