Exoplaneta con nubes metálicas como protección

Redacción/CDMX

Un mundo en llamas, donde llueven gotas de titanio son la principales características de el planeta mas brillante detectado fuera del sistema solar.

El exoplaneta, se encuentra a 260 años luz, las observaciones del telescopio espacial europeo Cheops (Characterising ExoPlanet Satellite) revelaron que este refleja el 80% de la luz de la estrella que orbita.

De esta forma, evita que su atmósfera se deintegre.

Siendo el primer exoplaneta que equipara el brillo de Venus, que es considerado como el objeto más brillante después de la Luna.

LTT9779b es el nombre que recibió este exoplaneta que fue descubierto en 2020.

Es del tamaño de Neptuno y es capaz de orbitar su estrella en 19 horas.

Por la proximidad que tiene con dicha estrella  la temperatura de su cara iluminada se eleva hasta los 2 mil grados.

Debido a las altas temperaturas debería ser complicado que se formen nubes, pero, la  reflectividad del planeta revela la presencia de nubes.

Vivien Parmentier, investigador del Observatorio de la Costa Azul explica al respecto “la formación de estas nubes ocurre de la misma manera que se produce la condensación en un baño después de una ducha caliente».

Una corriente ardiente de metal y silicato, lo cual sobresatura la atmósfera del LTT9779b, hasta formar nubes metálicas. 

Anteriormente, los únicos exoplanetas capaces de girar alrededor de su estrella en menos de 24 horas eran los gigantes gaseosos, que son 10 veces mas grandes que la Tierra o planetas rocosos con la mitad del tamaño.

LTT9779b es aproximadamente 5 veces más grande que la Tierra, se ubica en un lugar nombrado por los astrónomos como “El desierto caliente de Neptuno”, es un lugar en donde planetas del tamaño de LTT9779b serian incapaces de existir, comenta Parmentier.

Los astrónomos se sorprendieron al encontrar una atmósfera en el exoplaneta, puesto que, debido a la proximidad que tiene con su estrella es normal que arrastre cualquier tipo de formación gaseosa.

La explicación de este misterio se debe a “las nubes metálicas de LTT9779b actúan como un espejo» reflejando la luz y evitando que la atmósfera se desintegre, según Maximilian Guenther, científico jefe del proyecto Cheops.

(Con información de Deutsche Welle)