INAH encuentra un entierro prehispánico infantil en Tlatelolco

Redacción/CDMX

Especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) han registrado en el último mes un entierro infantil en Tlatelolco, lo cual se une al apantle (canal que transporta agua de un sitio a otro) del periodo virreinal temprano e incluso un basurero del finales del siglo XIX.

Los trabajos iniciaron a solicitud del Centro Cultural Universitario Tlatelolco (CCUT) de la UNAM, a fin de comprender el asentamiento en el que se encuentra el edificio obra de Pedro Ramírez Vázquez, que fuera sede de la Secretaría de Relaciones Exteriores.

Tlatelolco, proviene de la palabra nahua xaltilolli (montículo de arena).

La inestabilidad del terreno explica que los hundimientos fueran un problema a resolver desde su fundación.

La arquóloga Arely Maldonado Luna, resalta el hallazgo de un entierro infantil, el cual, posiblemente corresponde a una mujer, como hace suponer la ofrenda asociada de piezas cerámicas y malacates, cuyo uso en tiempos prehispánicos se vinculaba a actividades femeninas.

Se estima que datan del siglo XV, debido al estilo cerámico de una olla, un plato y un par de cajetes -cazuela de barro honda- del Azteca III Tardío (1400-1521 d.C.).

Por la profusión de las ofrendas, es probable que el infante perteneciera a la élite tlatelolca.

En tanto, el arqueólogo Javier Laue Padilla detectó un apantle de 40 centímetros de espesor, de la época colonial temprana, cerca del siglo XVI que distribuía agua a la población sureña proveniente de la caja de agua del Imperial Colegio de Santa Cruz de Tlatelolco.

El investigador destacó que para la construcción de este apantle se reutilizaron materiales de las construcciones prehispánicas, como lajas de basalto y piedras creadas de tezontle en sus paredes, aunque la tubería es de cerámica.

Además, en el sector oeste del CCUT se registró un basurero histórico donde se hallaron objetos miniatura, como soldaditos de cerámica y una copa de hueso trabajado.