Redacción / Ciudad de México
A través de un comunicado oficial por parte de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), expresaron su respeto y consideración a las opiniones diversas de quienes, dentro y fuera de ellas, discrepan con lo establecido en la reciente actualización de los Lineamientos para la Investigación Arqueológica en México, publicados por el INAH el pasado 6 de mayo de 2021; documento que busca sustituir y mejorar el anterior, publicado en 2017.
Al respecto, dentro del documento, las instituciones señalan que, «de acuerdo con la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos, la Ley Orgánica del INAH y su Reglamento, el Instituto es la instancia competente para normar sobre las investigaciones y proyectos arqueológicos que se realicen en el territorio nacional, con el único propósito de favorecer la conservación, el cuidado y el conocimiento del patrimonio arqueológico de nuestro país».
En particular, dicha tarea normativa le corresponde a la Coordinación Nacional de Arqueología, que se auxilia del Consejo de Arqueología, órgano colegiado consultivo de la Dirección General del INAH, integrado por académicos y profesionales de la comunidad arqueológica mexicana.
El documento publicado tiene el propósito de incentivar y regular las prácticas inherentes a la investigación, conservación, protección y difusión en materia arqueológica en el país. En él se precisan los procedimientos, derechos y obligaciones de los investigadores titulares de los proyectos, con sustento en las leyes, reglamentos y la normatividad interna del INAH.
La actualización responde al contexto actual de la práctica arqueológica en México, que se caracteriza por un creciente número de proyectos de investigación originados por el interés legítimo y encomiable de la comunidad científica, así como proyectos de intervención emergente, como rescates y salvamentos, que requieren la aplicación de recursos por parte de las entidades o empresas que llevan a cabo obras públicas o privadas, que demandan el acompañamiento arqueológico necesario, y la aplicación escrupulosa de las aportaciones de terceros.
«En las últimas décadas, el desarrollo tecnológico ha impulsado enormemente las distintas vertientes de la investigación arqueológica, incluyendo las que se desarrollan en el contexto de rescates y salvamentos; tareas que se llevan a cabo mediante complejos esquemas de trabajo que precisan el establecimiento de convenios de colaboración, incluyendo lo relativo al traslado autorizado de materiales arqueológicos para su análisis especializado, en México o en el extranjero.
La formulación de los Lineamientos surgió del análisis de la realidad arqueológica, no solo a nivel institucional, sino nacional e internacional. Como cualquier reglamentación, estos Lineamientos pueden ser debatibles y son sin duda perfectibles», se puede leer en el comunicado.
Ahora bien, con la finalidad de abrir un espacio de escucha de las inquietudes y propuestas que se han vertido por parte de la comunidad académica de la especialidad de arqueología, y de otras disciplinas que también participan en excavaciones, proyectos e investigaciones arqueológicas, y atendiendo a la necesidad de armonizar, los Lineamientos con lo establecido en el Reglamento de la Ley Orgánica del INAH, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 24 de mayo pasado, la Dirección General del INAH ha decidido iniciar el procedimiento para suspender los efectos normativos del documento aprobado el 22 de abril de 2021 en la reunión del Comité de Mejora Regulatoria Interna y publicado en la Normateca del INAH el 6 de mayo del mismo año.
De manera que, en su defecto y hasta en tanto no se genere un documento consensuado mediante los canales y mecanismos establecidos para tal efecto, se repondrá la vigencia de los Lineamientos anteriores, de fecha 19 de abril del 2017.
Imagen de portada e información: INAH y Secretaría de Cultura