Con más de 300 piezas exhibidas se busca contribuir al conocimiento del pasado y al respeto del presente
Ciudad de México (N22/Redacción).- Luego de la contingencia sanitaria, que detuvo las actividades culturales de la capital francesa, esta tarde, el Museo del Quai Branly-Jacques Chirac reabrió con una muestra inédita para el público europeo: Los olmecas y las culturas del Golfo de México, la cual resume con más de 300 piezas cerca de tres mil años de historia. Se trata del primer proyecto expositivo internacional organizado por la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), en 2020.
En la inauguración participaron la presidenta del Consejo Asesor Honorario de la Coordinación de Memoria Histórica y Cultural de México, Beatriz Gutiérrez Müller; el director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto Hernández, y el presidente del recinto parisino, Emmanuel Kasarhérou.
Gutiérrez Müller señaló que la olmeca es la civilización más antigua del continente americano, «se trata de la primera exposición de tal magnitud en Europa dedicada a esta enigmática cultura y que contiene piezas que nunca han salido de México».
Esta muestra busca contribuir al conocimiento del pasado y al respeto del presente para poner en perspectiva lo que podemos conocer sobre los orígenes de la humanidad y también para valorar las diferencias culturales con una visión más abierta, empática y tolerante.
La muestra se centra en los siguientes apartados: La cultura olmeca y los logros de los sitios de San Lorenzo y La Venta; Las primeras formas de escritura y el uso del calendario de cuenta larga mesoamericano; Mujeres y hombres del Golfo. De la civilización olmeca a las culturas huastecas, 2,500 años de arte estatuario; Ofrendas e Influencias culturales en otras regiones de Mesoamérica. A su vez, dedica un apartado al sitio huasteco de Tamtoc.
En cada uno de estos apartados se pueden admirar obras maestras como la “Cabeza Colosal No. 4” cuyo peso es de 4.5 toneladas y procede del sitio San Lorenzo-Tenochtitlan; “El Señor de las limas”, la “Ofrenda 4” de La Venta, “La mujer escarificada” de Tamtoc o el Monumento 1, mejor conocido como “El luchador”; facilitadas por recintos como los museos Nacional de Antropología, el de Antropología de Xalapa, y el Regional de Antropología “Carlos Pellicer Cámara” de Tabasco.
Steve Bourget, responsable de las Colecciones de las Américas del recinto parisino, ha dicho que, como arqueólogo, es también de apreciar que la mayoría de las 300 piezas que integran Los olmecas y las culturas del Golfo de México fueron recuperadas mediante excavaciones arqueológicas, lo que permite hablar de contextos histórico-culturales, y no sólo exponer piezas carentes de información, más allá de sus aspectos formales.
Explicó, además, que a fin de introducir al público europeo en un tema complejo que abarca un amplio espacio geográfico (Tamaulipas, Veracruz, el norte de Tabasco e, incluso, el Istmo de Tehuantepec, en Oaxaca), temporal (1600 a.C. al 1521 d.C.) y una diversidad etnolingüística no menos rica –a la llegada de los conquistadores se hablaban más de veinte lenguas en la región–, «se decidió plantear el área del Golfo de México, a través de uno los más antiguos desarrollos civilizatorios: los olmecas».
Información: Secretaría de Cultura