El diseño hecho por MAD Architects, con oficinas en Pekín y en Los Ángeles, se integra a un programa que busca reactivar la costa de Haikou, en China, con una efervescente vida cultural
Ciudad de México (N22/Redacción).- El estudio de diseño MAD Architects, dirigido por Ma Yansong, tiene buenas noticias para los amantes de la lectura: una biblioteca de concreto que permitirá a los visitantes alejarse, temporalmente, del caos de la ciudad y el bullicio de la vida cotidiana, la cual lleva el nombre de Wormhole Library.
El recinto que se encuentra en construcción, está ubicado en la costa de Haikou, en la provincia de Hainan, en China, permitirá a los lectores sumergirse en un acervo de unas diez mil lecturas, mientras disfrutan de la vista al mar así como de una gran cantidad de espectáculos culturales y artísticos al aire libre.
La biblioteca, además, ha sido elogiada por la impresionante arquitectura.«El pabellón de sensuales curvas parece ser un ‘”agujero de gusano” que trasciende el tiempo y el espacio», mencionó el equipo de diseño.
Este proyecto sólo es una pequeña parte de un plan más amplio que tiene como objetivo rejuvenecer la cosa de Haikou con nuevos espacios públicos.
El diseño monolítico está hecho con concreto blanco, lo que permite que el suelo, las paredes y el techo interiores de la biblioteca se interpreten como una superficie continua. Además, el edificio fue moldeado con un modelo impreso en 3D y CNC, lo que garantiza la precisión y la uniformidad en las superficies curvas. Mientras que todos los elementos mecánicos, eléctricos y de plomería se ocultaron dentro de la cavidad de hormigón.
Los diseñadores revelaron que el interior estará compuesto por dos partes: un espacio de lectura de aproximadamente 690 metros cuadrados, el cual podrá almacenar unos diez mil libros, un café y una terraza. La otra parte, será un área de descanso público de 300 metros cuadrados, que estará equipada con un sistema de estacionamiento de bicicletas, baños públicos y área de duchas.
Asimismo, la arquitectura cuenta con aberturas cuidadosamente colocadas; por un lado permiten al recinto respirar y por el otro, dejan entrar la luz natural que inunda el interior. Por otro lado, los espacios grises de los pasillos exteriores proporcionan lugares sombreados para que los transeúntes puedan detenerse a descansar.