México y Noruega trabajan sobre los retos que impone la pandemia y la sustentabilidad de los océanos

Una conversación con el embajador de México en Noruega, Ulises Canchola

Oslo, Noruega (N22/Huemanzin Rodríguez).- La Embajada de México en Noruega ha creado un sistema de trabajo estrenado en 2019 titulado Ecosistema Binacional de Innovación, que busca que las relaciones bilaterales sean recíprocas y enriquecedoras para ambos países. En entrevista el embajador de México en Noruega, Ulises Canchola, comenta parte de la agenda entre estos dos países y la colaboración conjunta para encontrar soluciones a los retos que impone la pandemia.

«Le diría que casi no hay tema multilateral de relevancia en el que México y Noruega no estén de acuerdo, no sólo de acuerdo, si no buscando los mismos objetivos. Los dos estamos convencidos de la importancia de lograr un acceso equitativo, universal y justo, no solamente a las vacunas sino a las herramientas necesarias para hacer frente a la pandemia.»

Para lograr una mejor colaboración, el 24 de octubre de 2019, con la presencia de Martha Delgado, subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Cancillería mexicana, así como de empresarios y autoridades noruegas, se presentó el Ecosistema Binacional de Innovación.

«Lo que buscamos con ello es una relación circular que genere riqueza, entendida también como bienestar, no solamente como negocio y dinero, sino que genere bienestar a nuestras sociedades. Buscamos aportar valores como la sustentabilidad, la equidad de género y la generación de conocimiento. En un contexto en donde el conocimiento es la moneda de cambio, en donde la tecnología se desarrolla exponencialmente, tenemos que aprovechar lo que nos da ese contexto para poder enriquecer nuestra relación.

»Para que esto suceda hemos identificado tres áreas. La principal es salud, la segunda, industrias creativas o economía naranja; y la tercera ciudades inteligentes.

»De modo tal que, cuando viene toda esta pandemia, nosotros llevábamos un trabajo de mapeo del ecosistema de innovación en México y el ecosistema de innovación de Noruega. Hemos estado en contacto con los capítulos de innovación en materia de Salud, tratando de hacer una genealogía: hay en México el desarrollo de aplicaciones para estudio clínico, porque hay lugares a los que no se puede acceder fácilmente en México, como los hay aquí también en Noruega.»

A principios de abril de 2020, México propuso ante la Asamblea General de Naciones Unidas una resolución para que los medicamentos, y cuando exista la vacuna contra el Covid-19, lleguen a toda la población de todos los países. Posteriormente, el 24 de abril, la diplomacia mexicana se suma al llamado de la ONU y la OMS, que establecen el Acelerador para el Acceso de Herramientas para hacer Frente al Covid-19, que se conoce como ACTA. El 4 de mayo, México se integra a la Coalición para las Innovaciones en Preparación para Epidemias (CEPI, por sus siglas en inglés), con sede en Noruega.

«CEPI es una coalición de países y de actores que fue establecida en 2017 en el marco del Foro Económico Mundial, con el propósito de hacer frente, preparar y desarrollar vacunas de aquellos virus considerados con un alto potencial pandémico, entre ellos están el SARS, el chikunguña, incluso se contemplaba un virus desconocido que pudiera aparecer. Ahí es cuando surge la pandemia; CEPI ya tenía una estructura muy bien hecha, México decide entrar a la coalición después de recibir una invitación por parte del gobierno noruego. Y es ahí en donde México continúa sumando esfuerzos, junto con Noruega y otros países otros países, para poder desarrollar de la manera más pronta y expedita posible la vacuna. Por supuesto, México continúa con su participación activa en ACTA, en el marco de la OMS.»

México y Noruega son países que tienen elementos en común, ambos dependen del mar para su alimentación y ambos tienen una economía basada en la explotación petrolera. En 2018, Erna Solberg, Primera Ministra del Reino de Noruega, visitó México. Entre sus actividades firmó un acuerdo bilateral para crear el panel “Economía sustentable de los mares”. A dos años de este acuerdo, ¿cuáles son los avances?

«Es un panel de alto nivel en el que participan 14 Estados, entre ellos México. En el caso de México, la representante del presidente es la subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos, Martha Delgado, que ha venido participando en diferentes sesiones de alto nivel. En este panel se aborda el tema de los océanos desde una perspectiva sustentable, es decir, cómo podemos seguir administrando, explotando y protegiendo los recursos del mar de manera sustentable. La participación ha sido sumamente exitosa, ya se ha logrado publicar los primeros resultados, se había propuesto este año para concluir el primer mandato, pero dado el éxito obtenido es altamente probable continúe con sus deliberaciones.



La subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos, Martha Delgado, en su participación en el Foro Promoting and Protecting Healthy Ocean. Fotografía, cortesía de la Embajada de México en el Reino de Noruega.

»Ha habido aportaciones interesantes, de manera particular en áreas como la acuacultura, en donde Noruega ha logrado desarrollar capacidades tecnológicas, curiosamente en parte, a la extracción de hidrocarburos.

Eso ha colocado a Noruega, en una posición que para algunas personas es contradictoria, ¿cómo es posible que un país promueva un desarrollo sustentable y base su economía en la explotación de petróleo? Bueno, a través de iniciativas como ésta, Noruega busca una transición. Es difícil que hoy un país pare su producción petrolera de un día a otro, y lo que está haciendo Noruega es tratar de desarrollar métodos ambientalmente más benignos en su forma de explotar hidrocarburos y los desarrollos tecnológicos derivados de dicha explotación, extrapolarlos y utilizarlos en otras áreas, es el caso de su industria acuícola. México se ha beneficiado en el diálogo bilateral de estas experiencias y trabajamos de manera estrecha para lograr una economía más sustentable, una economía azul en el caso de los mares.»

A principios de este siglo, hubo un importante recorte en el presupuesto a las representaciones diplomáticas mexicanas en el extranjero, por ello desde la Embajada de México en Dinamarca se trabajaba en todos los países nórdicos. En el sexenio pasado se abrió la Embajada de México en Noruega, ¿cuáles son los retos en esta representación mexicana en uno de los países con mayor estabilidad en el mundo?

«En primer lugar, que se conozca mejor a México, en muchos casos lo que se sabe de México se limita al tequila, los tacos y Frida Kahlo; y México es mucho más que eso. Tenemos poco más de treinta siglos de Historia, ese el es tamaño de México y el reto principal que tenemos como representantes de México en el exterior es poder transmitir el tamaño del país de una manera integral y completa a una sociedad como la noruega, superando los clichés. En segundo lugar, es fundamental el diálogo intercultural. Después de 135 años de relaciones diplomáticas entre México y Noruega, comerciando y trabajando, a penas nos estamos conociendo. Necesitamos hacer mucho más para conocernos y reconocernos. Y en un ámbito más amplio, el reto mayor es aportar un valor, nos preocupa y nos ocupa renovar el trabajo diplomático. Queremos aportar un valor a la sociedad que representamos y queremos proyectar un valor a la sociedad en que nos movemos, en un contexto cambiante como el actual. Ese es el reto principal que tenemos en Noruega y seguramente en el resto de nuestras representaciones en el mundo.»

Imagen de portada: Ulises Canchola / © Huemanzin Rodríguez