Cuatro artistas visuales realizaron un mural en uno de los espacios de abastecimiento más importantes de la ciudad; este proyecto forma parte del modelo Arte como motor para la transformación social
Ciudad de México (N22/Óscar Cortés).- “Es una ofrenda para toda la gente trabajadora”, dice Dan Silva, artista visual, pues durante dos meses, artistas visuales se unieron para trabajar en el mural El corazón de la merced, una obra que nació del diálogo entre comerciantes, habitantes, artistas y empresarios, quienes decidieron representar en el muro de una bodega de casi mil metros cuadrados, un mensaje de lucha y trabajo.
“Es un corazón de adobe, que es de la tierra, las raíces que tiene por ahí son los simbolismos del trabajo que hacen los seres. Es el hecho de salir adelante después del incendio con sus propios medios, es la familia, los antepasados que son unos guerreros”, continúa Silva.
La obra abarca cinco niveles del edificio que se encuentra en la esquina de la calle Juan Cuamatzin y Avenida Circunvalación. Es una pieza que representa la fuerza que han tenido los locatarios del Mercado de la Merced para sobreponerse del incendio que sufrieron en 2013.
“Estamos dejando que la gente nos de las herramientas para plasmar algo que tenga sentido para ellos, que tenga identidad, y se hizo a través de un programa que se llama INSITIA, que es de apoderamiento que varios chicos lo tomaron y con información y entrevista logramos llegar a esta conclusión. […] Somos cuatro artistas los que estuvimos dos meses dándole con todo.»
En este proyecto forma parte del modelo Arte como motor para la transformación social, que organizó el Consejo de Cultura del Barrio de la Merced junto con la fundación Orb, Colectivo indeleble y el Instituto de la Juventud de la Ciudad de México, que tiene como objetivo valorar la zona de abastecimiento más importante de la ciudad y fomentar el tejido social.
Imagen: Milenio / © Héctor Téllez