La gran pregunta no tiene una respuesta, pues aunque se realizan diversos esfuerzos para sacar de la opacidad la información de los fideicomisos, éstos aún no son suficientes
Ciudad de México (N22/Alizbeth Mercado).- ¿Qué ha pasado con los 38 mil 163 millones 343 mil 988 pesos aprobados para la reconstrucción? Para responder se necesita seguir el camino del dinero, entender qué recursos financieros existen, de dónde vienen y a dónde van. Sin embargo, hay muchas dudas al respecto. De acuerdo con el portal Transparencia Presupuestaria (del fideicomiso Fuerza México) los recursos para la reconstrucción se dividen en tres grupos.
El primero es de naturaleza pública y corresponde al Fondo Nacional de Desastres (FONDEN) que incluye Apoyos Parciales Inmediatos (Federal), Reconstrucción (Federal), Gasto de Evaluación (Federal) y Aportaciones estatales. De los 38 mil millones citados arriba, los rubros que cuentan con más recursos son educativo $9 mil 127 millones 837 mil 396; vivienda $7 mil 500 millones 508 mil 454 y monumentos arqueológicos y artísticos $6 mil 116 millones 162 mil 951. Para cultura se designaron $490 millones 568 mil 063 de pesos.
El segundo grupo corresponde a recursos privados donde se encuentran los seguros (que en su mayoría están pensados para la infraestructura educativa [SEP], patrimonial[INAH] y de salud [IMSS]), donaciones y otras fuentes de financiamiento. En el portal hay una base de datos que indica a qué instituciones fueron los donativos. El tercero son aportaciones adicionales para la infraestructura social (vialidades y servicios públicos afectados) y para las escuelas (aquí entra el programa Escuelas al CIEN y el de la Reforma Educativa).
¿Qué pasó con apoyos financieros de Canadá, Estados Unidos, Corea, Francia, Taiwán, Botsuana, Kuwait y Tailandia? De acuerdo con los datos oficiales, fueron destinados a la Cruz Roja Mexicana, World Vision México y al Fideicomiso Fuerza México. Pero las dos primeras instituciones no han transparentado el camino del dinero.
De acuerdo con Liliana Veloz, investigadora del CIDE y Directora Ejecutiva de la Red para la Rendición de Cuentas, “en los Fideicomisos se aglutinan cantidades enormes de dinero y lamentablemente no se han podido encontrar los mecanismos (para transparentar). Entra el dinero al fideicomiso, con la idea de que el fideicomiso blinda el dinero, se da por sentado que los recursos se van a ejercer de buena manera y no necesariamente. Los fideicomisos, hoy en día, siguen en la opacidad, tienen que empezar a rendir cuentas, ya hay algunos esfuerzos para transparentarlos como el caso de Fuerza México.”
Aunque en el portal de Fuerza México hay datos abiertos, es decir, una base de datos, tiene muchos espacios que no son lo suficientemente claros sobre el destino de los recursos como en el caso de las donaciones, que ya mencionamos.
“Lamentablemente a un año de que ya pasó esta emergencia estamos en un impasse de acciones, se cruzó el periodo electoral y eso también vino a frenar muchas de las acciones o a utilizar la emergencia de la gente con recursos para la reconstrucción y todo ha quedado como en stand by, frenado, podríamos decirle.”
¿Dónde está el dinero?
“La gran pregunta no tiene una respuesta, y ese es parte del asunto, ¿dónde están los recursos?, están en muchos lados. Hay distintos estándares para rendir cuentas, algunos lo han hecho mejor, el fideicomiso Fuerza México ha tratado de poner mayor información disponible al público pero no te podría decir lo mismo de la Cruz Roja Mexicana o de algunas instituciones bancarias que también recabaron recursos, no hay una sola plataforma, un solo repositorio donde podamos ver eso y eso es parte de lo que estamos trabajando para poder dar una respuesta más sencilla a la gente ¿no?”, Eduardo Bohórquez, director de Transparencia Mexicana.
El camino del dinero es confuso porque — de acuerdo con Veloz — llegó a cuentas de banco que canalizaron fondos, que luego iban a ser canalizados a otros fondos que, a su vez, iban a ser ejercidos por el gobierno u otro tipo de fideicomisos privados, que generaron sus propios fondos de reconstrucción para atender casos de reconstrucción muy específicos ante la emergencia y los propios esfuerzos del gobierno en los fondos estatales que ya existen como el FONDEN.
Las preguntas se multiplican, ¿reglas poco claras u opacidad? Hasta el momento, se sabe que el dinero se encuentra en fondos públicos y privados que han sido manejados desde distintos fideicomisos. Y según estimaciones de Transparencia Mexicana hay aportaciones extraordinarias de 2 mil 412 millones de pesos que fueron al FONDEN pero no se sabe el estatus de su aplicación. También encontraron que hay aportaciones extraordinarias por 279 millones 383 mil 366 pesos que están en el Fondo de Reconstrucción para las Entidades Federativas.
La pesquisa de Transparencia Mexicana también arrojó que: “al 31 de mayo del 2018 se recibió un total de 3 mil 904 millones 576 mil 949.46 pesos, de 693 donatarios y fideicomisos autorizados (…) De estos fondos, se han distribuido $1 mil 994 millones 143 mil 959 pesos en donde la mayor proporción ha ido para Oaxaca (19.8%) y para la Ciudad de México (13.3%); no se sabe a qué entidad federativa se destinaron 41.6% de los recursos privados dado que se canalizaron a otras donatarios y no se ha reportado su destino final.”
En la opinión de Bohórquez, “lo más importante es que el dinero está en muchas partes y que el país no puede seguir así. Si tenemos otra tragedia, se trate de un huracán, se trate de un deslave, se trate de un terremoto, tenemos la obligación de concentrar toda la información en un solo lugar.”
Además, de la rendición de cuentas y la publicación de datos abiertos, se necesita que las autoridades comuniquen de forma clara y asequible la información. “Creo que el mensaje más importante es el tema de los estándares, lo que no tenemos es claridad, no tenemos los mismos niveles de transparencia en todos los temas y ese es el verdadero problema, porque incluso hoy, la tecnología permite hacer una cosa, si estuvieran en bases de datos abiertas tú podrías generar una cosa que técnicamente se llama una API y conectar todas las bases de datos para alimentar un solo portal pero sólo en algunos lados están en datos abiertos esa información y ese es parte del reto”, explicó Bohórquez.
Para Veloz, no se ha bajado la información pública al nivel del ciudadano de a pie, “que es importante que la conozca, pero más que la conozca que la comprenda y que la pueda usar en su favor. Lo que se busca es darle certeza a la gente y lamentablemente no se ha logrado hacerlo. No nos ha quedado claro que sea nada más informar, ‘recibí cinco pesos y ahí están, recibí cinco pesos e hicimos este proceso para definir cómo se iban a utilizar y en la calle Juárez y en la esquina tal está la obra’. Debe ser un proceso integral que debe transparentar la información y estar acompañado de un proceso de rendición de cuentas que es lo que no se está dando.”
Como recomendación, ambas organizaciones señalan la necesidad de pensar en la reconstrucción desde una perspectiva social y de Derechos Humanos. “No nada más es darle recurso a la gente para recuperar su vivienda, es una estrategia que debe venir acompañada de muchas cosas, no nada más devolverle a la gente el patrimonio perdido o por lo menos una parte de ese patrimonio pedido”, en opinión de Veloz.
Para Bohórquez, la perspectiva de derechos humanos supone, “proteger los derechos de las víctimas, cuando son víctimas no solo de un terremoto sino de alguien que actúo de manera tramposa o negativa al momento de construir una vivienda, etcétera […] tener perspectiva de Derechos Humanos no solo te hace ponerte en los zapatos de otro, te obliga a repensar lo que tú crees valioso y te empiezas a hacer auténticamente solidario.”
Portal Transparencia Presupuestaria Fuerza México: http://www.transparenciapresupuestaria.gob.mx/es/PTP/fuerzamexico
Estudio de Transparencia Mexicana:
https://www.tm.org.mx/informe-reconstruccion-19s2018/
Diagnóstico de la Red para la Rendición de cuentas: http://rendiciondecuentas.org.mx/reconstruccion-19s-riesgo-de-captura-de-los-recursos/
Imagen: Cuartoscuro