Jorge Ayala Blanco charla sobre la imagen de la «flepper» en el cine estadounidense

Por Huemanzin Rodríguez

Ciudad de México, 07/ 08/14, (N22).- En 1927 fue estrenada una película It, de
Clarence G. Badger, protagonizada por la actriz Clara Bow. La cinta provocó un
revuelo tal, que popularizó en inglés el término “it girl”, una chica que más
allá de la belleza o su intelecto, posee “eso”. Sobre el tema charlamos como el crítico de cine Jorge Ayala Blanco: 
«Bueno, en Estados Unidos es  lo que ahora se diría un blockbuster, una
película rompe taquillas impresionante. En México no, curiosamente. En México es en una sala muy
grande. El estreno es en el 1927, a finales, en octubre. Le dan el Cine
Olimpia, que era gigantesco, el famoso cine que estaba en la calle 16 de
septiembre, que se quemó tres veces. Una sala emblemática de películas de buen
gusto, además era de las más caras, costaba $1.50 en aquella época, ¡que era un
dineral!».
También el personaje de Clara Bow en It,
terminó por popularizar el término “Flapper”, jóvenes que usaban mucho
maquillaje, bebían, escuchaban jazz, fumaban, conducían y no usaban corsé.
«Todas estas chicas de cabello
corto, peinado que se llamaba a la ‘bobbi’, la falda corta, la boquita de ‘corazón’, de ‘cupido’, es decir la boquitas pintadas. Es como una vampiresa cándida». 
Aunque Clara Bow ya había filmado películas
antes de It, fue con esta comedia romántica silente que comenzó su camino a la
fama.
«En realidad ella es una chica muy
pobre, con una madre esquizofrénica, un padre abandonador totalmente ebrio,
consuetudinario. Y ella participa en ese concurso y el premio es actuar un
pequeño papel para B.P.Shulberg, el productor que después se incorpora también
con Clara Bow, a la Paramount. Y curiosamente el papelito que ella hace lo
cortan en la edición final. Pero se queda y empieza a escalar. Es una actriz que tiene una carga
erótica impresionante, eso es precisamente a lo que se refiere el término It,
que por supuesto, es un término freudiano que aclimatan en Hollywood y se
convierte en la chica del ‘Ello’, la chica del instinto sexual, ésa es la idea.
Además, ella sirve a su personaje».
Pero en realidad la película queda rebasada
por el personaje de Bow, pues la cinta es más un argumento que bien podrían
interpretar hoy Ana Serradilla o Martha Higareda.
Y Ayala Blanco continúa: «Hay una frase de ella en una de
sus primeras películas habladas que se ha convertido en algo que todo mundo se
quiere apropiar. En realidad es de una de sus películas, dice: ‘Mientras más
conozco a los hombres más quiero a mi perro’. Es una frase de Clara Bow. Y es la historia de una chica que
vende lencería en una tienda. Hay un personaje que se enamora de ella, es el
dueño de la tienda que es nada menos que Antonio Moreno, el galán hispano del
cine que finalmente va a ser director de la primera película de Santa, la
primera película sonora mexicana».
En 1927, año en que el poeta y ensayista
Jaime Torres Bodet deja de escribir crítica de cine, en una de sus últimas
críticas escribe algo sobre las «flappers».
«En un estudio ensayístico que hace
Jaime Torres Bodet sobre las ‘flapper’ y la chica del ‘It’, especialmente a Colleen
Moore, se refiere a ella como: ‘De una ágil gracia mimosa’. Nadie usaría esos
términos actualmente. Y para describir a esta idea que decía yo, equidistante
de la ingenua a la vampiresa, de la seductora a la gran estrella, Bodet dice: ‘El
mismo fuego epiléptico la enreda y desenreda al tallo sinuoso del erotismo’.

«Era un
personaje que era totalmente desquiciado, para la época era peligrosísima. Hay
un dicho que casi no se utiliza, y con eso me gustaría terminar, que decían
(todavía en la época, yo llegué a oírlo): La pequeña moderna es la gran viciosa», concluyó el maestro. 

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Imagen:http://bit.ly/1yaAdmR

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