- Cómo contar una historia para que sea amena, para que sea interna y cercana, y no se sobreactúe lo judío
Por Víctor Gaspar
@gasparvictor
Distrito Federal, 06/11/13, (N22).– “Tiene muchísimo que contra, muchísimo que decir, sobre momento presente, particularmente lo que está pasando en Israel y Palestina, ese conflicto que, desde su perspectiva, desde lo que ella ha vivido, pues es como muy difícil de soportar y definitivamente está muy adolorida y muy en contra de lo que está pasando, sin tomar un lado pero tiene una postura muy clara en contra del fundamentalismo, en contra de la injusticia. Ella considera que toda vida, del lado que sea, tiene el mismo valor”, comentó la actriz Amanda Schmelz.
Ella es Rose, es una mujer judía de 80 años, sobreviviente del holocausto, pasajera migrante del buque Exodus. Ella se enfrasca en un monólogo que habla de sus vivencias personales que son también las de un testigo de buena parte de la historia del siglo XX.
“Cómo contar una historia para que sea amena, para que sea interna y cercana, y no se sobreactúe lo judío en una caricatura, ni la vejez, sino que la vejez es algo interno. Pero pasan tantas cosas internas, y luego con su pelo ella va transformando los personajes por los peinados que se va haciendo y entonces la podemos ver muy jovencita, muy elegante, o muy despeinada cuando está en el Ghetto de Varsovia”, explicó la directora de escena Sandra Félix.
En opinión de Schmelz , cada personaje, no sólo ella, sino que cada personaje del que se habla en la historia está muy bien definido. Con pequeños detalles, este autor logra como tocar el inconsciente.
“La puesta con Sandra fue definitivamente darle la palabra ese poder evocativo que tiene con las imágenes que uno es capaz de generar. Entonces, como decimos, sí pasa allá arriba, en el escenario, pasa aquí abajo”.
Rose se presenta en el Teatro La Capilla los lunes a las 7 de la noche hasta el 9 de diciembre.
Imagen:http://bit.ly/1hNHkMQ
13AM