- «Capistrán «fue sin duda el conocedor más estricto, más amplio de nuestra poesía»
Por Alfonso Arredondo
La academia Mexicana de la Lengua (AML) organizó un homenaje luctuoso en las instalaciones del Museo de Bellas Artes, para recordar al investigador veracruzano Miguel Capistrán y al historiador poblano Salvador de la Cruz, a un año de su fallecimiento.
El evento se llevó a cabo con la presencia de Jaime Labastida, director de la AML; Julieta Fierro, investigadora del Instituto de Astronomía de la UNAM; Tarsicio Herrera Zapién, escritor, investigador y académico mexicano, y Sergio Fuentes, director del Centro de Nanociencias y Nanotecnología de la UNAM.
Jaime Labastida comentó que que Capistrán «fue sin duda el conocedor más estricto, más amplio de nuestra poesía, particularmente de nuestra poesía del grupo que conformaban la revista Contemporáneos» y por ello la partida del ensayista representa una gran pérdida para las letras nacionales y para la Academia.
Por su parte, Julieta Fierro hizo una excelente remembranza sobre Capistrán con una semblanza de sus anécdotas, combinando el buen humor de los versos de Capistrán citados por Fierro.
Miguel Capistrán (1939-2012) estudió letras modernas en la UNAM, fue investigador de la Hemeroteca Nacional y miembro del Instituto de Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, así como miembro de número de la AML.
Entre sus trabajos se encuentran ensayos, antologías como Prosa de José Gorostiza, Crítica cinematográfica de Xavier Villaurrutia, Los Contemporáneos por sí mismos, Poemas y ensayos de Jorge Cuesta (en colaboración con Luis Mario Schneider), Prosa, Borges y México. Poemas de la Revolución Mexicana (en colaboración con Pável Granados), México se escribe con J. Una historia de la cultura gay (en colaboración con Michael K. Schuessler).
Acto seguido dieron paso a la participación de Sergio Fuentes y Tarsicio Herrera quienes se encargaron de recordar todas las glorias del poblano Salvador Cruz, al cual describieron como un mexicano de atributos polifacéticos.
Salvador Cruz (1932-2012) estudió la carrera de Medicina. Sin embargo, nunca ejerció debido a que desde joven se dedicó a la investigación de la historia y letras. Fue miembro fundador del Consejo de la Crónica de Puebla y de la Sociedad Mexicana de Bibliófilos A.C., e integrante del Seminario de Cultura Mexicana, de la Academia Sevillana de Buenas Letras y de la Academia Nacional de Historia y Geografía.
El integrante de la Academia Mexicana de la Lengua realizó varias obras en las que se destacan las Notas para la Historia de Tehuacán, Antología Letras Poblanas, Cien Personajes Iniciales de Puebla de los Ángeles, Siglo XVI, Morelos de Tehuacán, Francisco I. Madero. Un Hombre, un Libro, un destino, entre otros.