Juan Miguel Zunzunegui propone en su nueva novela «asumirnos como mestizos»

  • “A nuestra historia le urge
    una revisión y sobre todo una reinterpretación”: Juan Miguel Zunzunegui
  • «El periodo virreinal que “es el periodo que peor nos enseñan en las escuelas, todo nos enseñan mal»

Por Alizbeth Mercado (@alizbeat)

Distrito Federal, 05/08/13, (N22).- 
Intento tomar nuestra
hispanidad e indigenismo y fusionarlos, aceptar el mestizaje que se toma en la
catedral, me parece que nos han educado para vivir en el pasado y sugiero que
el pasado no tiene nada para nosotros, el pasado está muerto y en México
vivimos en el pasado. Debemos soldar los traumas y aprender a ver hacia
delante, sólo así llegaremos al futuro, en opinión de Juan Miguel Zunzunegui,
autor de Los cimientos del cielo.

Detrás de la historia de
Pedro Aguilar quien intenta impedir la construcción de la Catedral
Metropolitana de la Ciudad de México y su hijo con nombre homónimo, que se
convierte en arquitecto y pretende terminar la obra; subyace un relato sobre
los 300 años que tardó en edificar este edificio.

Asimismo, Zunzunegui intenta
rescatar el periodo virreinal que “es el periodo que peor nos enseñan en las
escuelas, todo nos enseñan mal, pero en esa época se forma todo lo que somos,
la época del mestizaje, folclor costumbre, lo que el mexicano es se da en este
periodo. Con la Catedral como pretexto puedo hablar de este periodo”.

El 17 de junio de 1847 se
inauguró la Catedral Metropolitana, por tanto, en el marco de la celebración
número 200 de este hecho, Juan Miguel decidió escribir Los cimientos del cielo,
que según explicó, tiene por objetivo, además de hablar del Virreinato, entender
en qué consistió la llamada “conquista”.  

“No existe tal cosa (la
conquista de México) porque México no existía, se dio la conquista de Tenochtitlán,
y el mito es muy centralista, ya que
esta ciudad era la capital del imperio azteca y no era un imperio, ni era México,
ni sus habitantes eran mexicanos.
A partir de ahí viene la conquista de Mesoamérica,
el mestizaje y el día que dejemos de decir
que México tiene 3 mil años de historia, (porque los olmecas, purépechas,
mayas, toltecas no eran mexicanos), propongo que dejemos de decirlo y que usemos
la conquista como pretexto y justificación de todo lo que sale mal”.

Zunzunegui pretende subrayar
el espíritu maniqueísta que advierte en la enseñanza de la historia de México.
“Creo que nos instruyeron tristemente a separar nuestras dos grandes raíces en
lugar de fusionarlas en lo mexicano.
Nos enseñan a echarlas a pelear. México es
el país con mayor hispanohablantes y renegamos de la conquista aunque somos
‘orgullosamente’ católicos y guadalupanos, estamos llenos de contradicciones”.

¿Por qué llamar maniqueísta
a la historia?, Zunzunegui explicó a AgenciaN22 que a través de la escritura de la novela Los cimientos del cielo, advierte que “nuestra historia es como
telenovela barata del Canal 2 de Televisa, donde el malo es malo perverso y el bueno muy bueno,
por eso nuestra historia es conflicto. Si el bueno es Benito Juárez, Porfirio Díaz
es el malo,  y esta visión nunca nos va a
llevar a nada.


En el título, la Catedral es
un símbolo de la conquista. La construcción del edificio significa para Pedro
Aguilar el triunfo de los españoles, también significa la obsesión del
personaje por impedir el proceso de mestizaje.

“A nuestra historia del urge
una revisión y sobre todo una reinterpretación. Nuestra historia actual nace
después de la revolución con el nacionalismo, (que por cierto se trajo de Europa),
y a partir de ahí es, la ilusión que un pueblo es una raza y pretender que un
país existe desde siempre, de ahí que nos digan que la Malinche es traidora a
la patria cuando no habría patria. Es como si los norteamericanos dijeran que Pocahontas
fue traidora o los turcos se lamentaran por la toma de Constantinopla”.

La novela se compone por más
de 300 hojas, es un texto de largo aliento, que comenzó con una investigación
en la Catedral Metropolitana. Zunzunegui recorrió los sitios donde no entran
turistas y “hay muros del templo de Quetzalcóatl y todo empezó ahí. Investigue
los procesos europeos de entre el siglo XVI y XIX, para entender lo que pasó aquí
y así de mal nos enseñan historia y pensamos que la independencia es un hecho
aislado”.

La novela puede servir para
los no iniciados en la lectura, ni en las novelas históricas de largo aliento,
ya que mezcla diálogos con fragmentos de prosa que explican las situaciones.
Pero ¿cómo crear personajes a partir de
archivos y quizá deducciones?

La creación
de personajes fue lo más difícil. Los
cimientos del cielo
es una serie de historias de 1487 y termina en 1813 con
la inauguración, hacer personajes de 300 años es complicado. Tome un personaje
principal llamado Pedro Aguilar que siempre se llama igual durante 10
generaciones, porque en México y Nueva España el tiempo parece no pasar por
estar ancadlos en las mismas ideas. Tratamos de enfrentar el futuro con ideas
del pasado, es como si discutimos la reforma energética y la izquierda trae el
fantasma de Lázaro Cárdenas para enfrentar el siglo XXI con respuestas del
siglo XIX. Con lo grandioso que fue sus respuesta no pueden ser las de hoy,
trato de representar eso con los personajes, entre los que sí buscan cambiar
sus ideas y los que no. Busco este choque de presente y pasado”.

Juan Manuel Zunzunegui es
autor de la trilogía  El misterio del águila, La diosa y la serpiente, La
caída del dragó
n, (que relata
la Independencia de México) y Los mitos
que nos dieron traumas
. Es comunicólogo,
investigador y doctor en humanidades. Los cimientos del cielo es una edición de Grijalbo.

Imagen http://bit.ly/16vDPFr

13MAG 

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