El Estanquillo recuerda a Santiago Hernández, el niño héroe artista

  • «…Gracias a la prensa, gracias al grabado se pudieron ir reconociendo quiénes eran los protagonistas de la Historia de México. Y eso se va a ver muy bien aquí”

Por Huemanzin Rodríguez

Ciudad de México, 08/02/16, (N22).- Él
nació en 1833. Un artista que con fervor defendería el liberalismo tanto
en el frente como desde la pluma, así lo podemos constatar a través de 180
obras en la exposición Santiago
Hernández, niño héroe, caricaturista romántico, artista fundamental
en el
Museo del Estanquillo. 
El orden de la muestra es cronológico, comienza con
fotografías familiares. Hay algunas obra que recuerdan diferentes momentos de
la invasión estadounidense de 1846, cuando Hernández fue también
un niño héroe en la defensa del Castillo de Chapultepec, después viene su
trabajo con la pluma.
“Hay una parte de dibujos fantásticos con figuras monstruosas pero también nos preguntamos qué
significado tienen en el sentido político», dijo Ana Catalina Valenzuela,
coordinara de exposiciones del Museo del Estanquillo.
Hernández trabajó
en varios periódicos y publicaciones liberales desde donde continuaba con su
crítica en los tiempos en que se diseñaba el Estado-Nación.
“El
principal es La Orquesta es de los
primeros diarios mexicanos, de los que duraron más y de los que eran de
oposición junto a El palo de ciego y El
Ahuizote
, esos son los fundamentales. Hubo otros más que tuvieron una duración
muy corta”.
Hay
otro apartado donde se ven las ilustraciones que Hernández hizo
para libros de Vicente Riva Palacio, como Memorias
de un impostor
, Martín Garatuza o
Los piratas del Golfo. También
ilustró a Víctor Hugo en obras como El hombre
que ríe
y Noventa y tres. Víctor
Hugo declaró en 1841: “Soy un poco poeta, pero soy un mucho soldado”, frase que
parece ajustarse a Hernández, quien admiraba al escritor francés.  
“La
situación política y social del país, pues también a la población los hacía
afiliarse al ejército para hacer las filas más grandes”.
Le
sigue el núcleo con dibujos firmados por Gaitán, un caricaturista muy crítico
del siglo XIX que, Rafael Barajas “El Fisgón”, curador de la exposición,
considera que es uno de los pseudónimos que usó Hernández para poder publicar y
escapar de la censura. De hecho hubo varios trabajos que hizo sin firmar en
periódicos como El Ahuizote. Más
adelante, hay una selección de obras que Hernández hizo para El libro rojo de Riva Palacio.
“Para
nosotros ahora es muy fácil y ya sabemos quiénes son los héroes patrios, las
líneas del metro nos dicen quiénes son los héroes, las calles, pero en el siglo
XIX no, era una nación emergente. Entonces estas imágenes proponían ser la
difusión de lo que los mexicanos iban a apropiarse como su Historia. Gracias a
la prensa, gracias al grabado se pudieron ir reconociendo quienes eran los
protagonistas de la Historia de México. Y eso se va a ver muy bien aquí”.

En
ese tenor romántico, hay una sección de retratos donde podemos ver a un Morelos  sin el paliacate que cubre su cabeza, muchas de estas imágenes que
hasta la fecha son familiares. 
El
final de la exposición tiene paisajes de los tiempos de la construcción del
ferrocarril en México. 
Santiago Hernández fue un artista muy
reconocido entre 1861 y 1908, año de su fallecimiento que después fue olvidado,
y que hoy, más de un siglo después su muerte el Museo del Estanquillo propone
recordar y reconocer a este otro niño héroe, artista fundamental. 
Imagen:http://bit.ly/1RiLEXv
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