Redacción/CDMX
En el marco del Día Internacional de las Viudas, que se lleva a cabo el 23 de junio, académicas de la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS) y de la Facultad de Derecho de la UNAM recordaron que de acuerdo al Inegi, 3.7 millones de mujeres en México son viudas, y casi el 77 por ciento de ellas son jefas de hogar.
Imelda González Guevara, académica de la Facultad de Derecho aseguró que para el Derecho mexicano el concepto de “viudas” está rebasado pues solo hay dos estados civiles: solteras o casadas.
Afirma que el término viuda es más bien un concepto sociológico tradicional.
Aclara que en muchos documentos oficiales la figura de viuda se incluye en las opciones pero jurídicamente nada más tenemos soltera o casada.
González Guevara destaca que a partir de que pierden a sus parejas, las mujeres pueden empezar a atravesar una serie de violencias transversales, pues la sociedad las minimiza por ser mujeres, luego por no tener marido, y a eso se suman otros condicionantes como sus situación económica y que no tengan preparación académica.
“Dentro del mismo núcleo social o familiar se les somete a rituales de duelo vejatorios, se les pone en ayuno, o deben empezar a servir a la familia, pues cuando fallece el marido, la esposa queda como propiedad de la familia política, pero sin derechos”, afirma.
Ariana González Rodríguez, académica de la ENTS, subrayó que vivimos en una sociedad patriarcal que dicta que una mujer vale más cuando está casada que cuando es viuda.
Así que cuando enviuda joven todavía se puede casar “pero si es una adulta de 50 años, se le asignan ciertas actividades de dependencia incluso económica hacia los familiares”, comentó.
En comunidades ejidales, las viudas que heredan no tienen voz ni voto dentro de las asambleas, e incluso la propia comunidad ejidal decide, dentro de los familiares hombres quiénes serán los herederos.
Por ello, González Guevara enfatizó la necesidad de contar con un testamento para que se respete la voluntad del cónyuge.
Ambas especialistas coincidieron que se puede buscar apoyo en las redes de grupos feministas, las cuales suelen contar con abogados para que ellas puedan defenderse.
Y, consideran que es necesario trabajar como sociedad para desmontar esta mirada sesgada y errónea de lo que implica ser viuda.
(Con información de Gaceta UNAM)