RCR, más que conquistar la tecnología, volver a la naturaleza

El proyecto más reciente de este grupo de arquitectos catalanes se centra en “recuperar el medio al que pertenecemos” más que en la arquitectura

 

Ciudad de México (N22/Redacción).- Ganadores del Premio Pritzker en 2017, los fundadores del estudio catalán RCR Arquitectes, creen que “en la naturaleza está todo”. Es así como el trabajo de Rafael Aranda, Carme Pigem y Ramón Vilalta, desde su fundación, en 1988, se ha regido por tres ejes: la investigación, la transversalidad creativa y el paisaje natural como inspiración. Ahora, y siguiendo esas premisas, se han hecho de una finca del siglo XIII. Ahí, han desarrollado un proyecto que busca más que la conquista de la tecnología en términos de diseño y construcción, “recuperar el medio al que pertenecemos”, se lee en una nota del diario El País.

En una entrevista que tuvimos con Rafael Aranda en la pasada edición de Mextrópoli, el arquitecto señalaba que para ellos, la arquitectura “no deja de ser la construcción de unos sueños” y es en esta definición donde cabe lo que están haciendo en La Vila, en Vall de Bianya, un municipio en la Garrocha, cerca de su espacio en Olot. Ahí, desarrollan un proyecto que busca la “renaturalización de la vida”.

Este es un espacio sin maquetas ni planos, “apenas habla de arquitectura, sino de vida”, explican los arquitectos en la nota publicada en el diario. Ahí mismo señalan que esta investigación que se enfoca en diferentes disciplinas y que integra a otras oficinas, no tiene fechas de inicio o de término pues  “volver a la naturaleza” es un proyecto vital. El proyecto aún sin nombre, se centra en eso, en la vida, en la transversalidad de las dinámicas, de los espacios, de la forma de usarlos, de habitarlos, de conectarse con ellos que en la arquitectura. “No porque seamos arquitectos se debe imaginar una intervención arquitectónica”.

 

Imagen: RCR Arquitectes