Un documental y una serie pictórica muestran el viaje y los peligros a los que se enfrentan los migrantes en la búsqueda de una vida mejor
Ciudad de México (N22/Óscar Cortés).- Por diez días el artista Alfredo LIBRE Gutiérrez (Tijuana, 1982) acompañó una caravana de migrantes que partió de Cuautitlán, en el Estado de México, hasta llegar a Mexicali. Recorrieron la Ruta del Pacífico con una cobija, una botella de agua y con la firme intensión de mejorar su situación económica. El artista mexicano registró el viaje con videos y fotografías que forma parte de la exposición A bordo de la bestia.
“La Bestia ayuda, transporta pero es salvaje, si empieza a andar y de repente le agarras confianza te puedes resbalar muy fácil por la inercia, y el movimiento te jala hacia las llantas. De repente hay gente mutilada en la caravana que cuenta su historia y es de terror, pero también la gente está dispuesta a arriesgarse porque ya no pueden estar en sus países, y hay que tener esa mentalidad abierta para ayudar al migrante, al hermano centroamericano que tienen esa necesidad.”
Cada migrante carga con una historia de intimidación que les obliga a salir de sus lugares de origen. “La violencia por parte del crimen organizado, de los gobiernos inclusive, estaba en un punto en el que no hay forma de desarrollarse: es huir o la muerte”, dice Gutiérrez.
A lo largo de los cinco mil kilómetros, los migrantes están expuestos a la intemperie, sufren hambre, enfermedades y peligros que se olvidan cuando la gente se solidariza con ellos.
“Ojalá nos solidaricemos con nuestros amigos centroamericanos, de repente hay algunas actitudes que no son las correctas, seamos tolerantes y ayudemos.
A bordo de La Bestia, es una muestra que busca concientizar y exponer las dificultades por las que pasan los migrantes en su viaje, de la que se desprende un documental y una serie pictórica del artista mexicano. Ésta última se puede ver en el Seminario de Cultura Mexicana, hasta el 20 de enero.