Lo cotidiano, lo político y lo simbólico en el acto de fumar, un trabajo del artista mexicano Gonzalo Lebrija, en el Tamayo
Ciudad de México (N22/Redacción).- Gonzalo Lebrija estudia el tiempo y la experiencia subjetiva. Es así que construye situaciones en las que el tiempo funciona como materia prima. Va diseccionando momentos que dan forma a un momento concreto. Vía Láctea es uno de ellos. La exposición que ahora ocupa una de las salas del Museo Tamayo fue expuesta antes, en el 2016, en el Palacio de Bellas Artes de La Habana.
Es, precisamente, en La Habana donde este trabajó se desarrolló. Lebrija fotografió a un grupo de fumadores de esta ciudad mientras consumían tabaco de la producción más selecta de la casa Vegas Robaina. Atravesó sobre de ellos, un haz de luz que acentúa el serpenteo del humo que se disipa sobre sus cabezas.
El gesto va más allá de la forma, como en trabajos anteriores, mediante un gesto casi cotidiano, Lebrija busca explorar las relaciones sociopolíticas que pueden derivar del mismo acto de fumar: la marca del tabaco y la figura del fumador como símbolo de poder. Además, aunque no se menciona, está también el hecho de que la mayoría de los fumadores en este tableau vivant, son hombres.
“Durante una parte importante de su carrera”, Lebrija, “ha trabajado sobre sucesos y costumbres cotidianas dentro de su contexto geográfico, a la par de las estructuras sociales que estos implican”. La muestra se inauguró el pasado 20 de octubre y se podrá ver hasta febrero del próximo año.