Por Huemanzin Rodríguez
Ciudad de México, México, 21/01/16, (N22).- En el edificio que actualmente es el Museo de la Ciudad de México estuvo el estudio del pintor Joaquín Claussel (1866-1935). Fue un lugar cerrado pero es hasta nuestros días uno de los sitios más importantes en la Historia del Arte de nuestro país. Al recordar ese pasado, el director del museo, José María Espinasa, invitó al artista plástico Jazzamoart, para que creara una obra dentro del recinto, es decir, que la antigua casa de avenida Pino Suárez funcionara como un estudio donde la gente pueda ver el proceso de creación de una pintura. Finalmente la obra ha quedado terminada bajo el título El antro de las mil ventanas.
«Este trabajo también es un homenaje no sólo a Claussell, sino también a mi padre y a mi abuelo y a más de 50 años de vivir el Centro Histórico, por todo lo que hay y por lo que me ha nutrido. Fue muy interesante convivir con todo el personal que hay aquí, que deambulaba, los que te observan sin decir nada. Los que te observan y no entran hasta lo que te preguntan toda clase de cosas», dijo el artista plástico.
Así el
Antro de las mil ventanas celebra también la interacción de la gente con el artista que no está encerrado en casa, en su estudio, lejano de lo que ocurre afuera. Como alguien que comparte su oficio con desconocidos que podrían ser aprendices.
Eso es lo que se ve en la obra de Jazzamoart, que lo mismo evoca a las primeras galerías y las pinturas de ellas: cada cuadro/ventana es una parte del Centro Histórico. En este antro los parroquianos son Salvador Novo, Octavio Paz, Carlos Fuentes o Efraín Huerta. Lo mismo conviven José Alfredo Jiménez, con Tin-Tán, Miles Davis y Café Tacuba. Nacho López y Héctor García entre meses atisban miradas fotográficas. Siqueiros, Orozco, Aceves Navarro, Montenegro y Claussell comparten con Meche Barba, Ninón Sevilla, Lola Beltrán o Raquel Tibol. Esta pintura tiene la versión del México que le interesa a Jazzamoart.
«Los fantasmas que habitan este museo y que deambulan por estas calles de la ciudad, me nutrían y me convocaban a pintarlos y a pintar los lugares, sobre todo los más fantasmales y los lugares que ya no existen, los lugares que conocí de niño o adolescente.
«Aquí en este mural me tomé algunas licencias, anda por ahí Miles Davis y Charly Parker pero también está Agustín Lara, José Alfredo, Chava Flores, Rockdrigo, porque también es un homenaje que me tocó conocer y vivir en el centro».
El proceso de la pintura
El antro de las mil ventanas está documentado en el catálogo de la sala, que no es una simple hoja de datos con una presentación. Ha sido cuidada su edición y es el primer resultado de Editarte, una editorial independiente que busca continuar con esta línea de trabajo.
La pintura El antro de las mil ventanas de Jazzamoart se exhibe en el Museo de la Ciudad de México.
Imagen: http://bit.ly/1OA0N3F
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