- Hablar de sexualidad y más en el caso de las mujeres resulta aún un tabú en nuestro país a decir de la actriz que encarna a Laila
Por Víctor Gaspar
Distrito Federal, México, 04/08/14, (N22).- Laila es una oficinista que
ronda los treinta años y que sufre los embates de un jefe despótico y una madre
castrante que le reprocha su soledad. Pero eso cambia por las noches cuando se
vuelve la reina del sexo verbal a través de una hot-line. Laila es la puesta en escena que el dramaturgo Renato Guillén
escribió en cercana colaboración con el director y la actriz para mostrar el
sexo y el erotismo como una forma de liberación y reivindicación de la mujer.
ronda los treinta años y que sufre los embates de un jefe despótico y una madre
castrante que le reprocha su soledad. Pero eso cambia por las noches cuando se
vuelve la reina del sexo verbal a través de una hot-line. Laila es la puesta en escena que el dramaturgo Renato Guillén
escribió en cercana colaboración con el director y la actriz para mostrar el
sexo y el erotismo como una forma de liberación y reivindicación de la mujer.
En entrevista Omar
Quintanar, director de escena, aseguró que ese drama humano es enfrentarse a la
soledad y auto reconocerse dentro de ella. Es verse como un ser que se tiene
que reconciliar consigo misma, que ha vivido un tiempo en un coma emocional y
que, de repente, por ciertas cosas que le van pasando en esta noche en
específico, se va reconciliando y se va reencontrando consigo misma.
Quintanar, director de escena, aseguró que ese drama humano es enfrentarse a la
soledad y auto reconocerse dentro de ella. Es verse como un ser que se tiene
que reconciliar consigo misma, que ha vivido un tiempo en un coma emocional y
que, de repente, por ciertas cosas que le van pasando en esta noche en
específico, se va reconciliando y se va reencontrando consigo misma.
Hablar de sexualidad y más
en el caso de las mujeres resulta aún un tabú en nuestro país a decir de la
actriz que encarna a Laila.
en el caso de las mujeres resulta aún un tabú en nuestro país a decir de la
actriz que encarna a Laila.
“Son cosas que como sociedad
nos pueden poner muy mal. Sin embargo, existen y están ahí latentes todo el
tiempo y no podemos hacernos los occisos ante ello. Pero además hay una manera
divertida también de contar esto, no hablar de sexo es, o me persigno y me doy
golpes de pecho, o entonces me libero y grito, ¡no! También esto se puede
contar de manera divertida y nuestra sexualidad y nuestras emociones también
son divertidas. Y eso es una de las cosas, de los grandes placeres de la vida”,
afirmó la actriz.
nos pueden poner muy mal. Sin embargo, existen y están ahí latentes todo el
tiempo y no podemos hacernos los occisos ante ello. Pero además hay una manera
divertida también de contar esto, no hablar de sexo es, o me persigno y me doy
golpes de pecho, o entonces me libero y grito, ¡no! También esto se puede
contar de manera divertida y nuestra sexualidad y nuestras emociones también
son divertidas. Y eso es una de las cosas, de los grandes placeres de la vida”,
afirmó la actriz.
Por su parte, el director de
montaje opina que mientras la sexualidad se ejerza de manera responsable y
respetuosa, esta es un pleno derecho.
montaje opina que mientras la sexualidad se ejerza de manera responsable y
respetuosa, esta es un pleno derecho.
La mujer en México no tiene
una puerta abierta para hablar de su sexualidad o para explorar su misma
sexualidad. “Vivimos en un ghetto, que en la Ciudad de México, en donde las
mujeres pueden explorar muchas cosas, en donde las mujeres tienen muchas
mayores libertades, pero resto del país no vive la misma situación, y abordar
un tema en una sociedad completamente machista de una mujer, sexualmente
responsable, sexualmente muy activa, y que aparte se atreve a erotizar al de
enfrente, y de ganar dinero por eso, de inmediato te lleva al concepto de, es
una prostituta, es promiscuidad, es banailización del sexo, banalización del
amor”, finalizó Omar Quintanar.
una puerta abierta para hablar de su sexualidad o para explorar su misma
sexualidad. “Vivimos en un ghetto, que en la Ciudad de México, en donde las
mujeres pueden explorar muchas cosas, en donde las mujeres tienen muchas
mayores libertades, pero resto del país no vive la misma situación, y abordar
un tema en una sociedad completamente machista de una mujer, sexualmente
responsable, sexualmente muy activa, y que aparte se atreve a erotizar al de
enfrente, y de ganar dinero por eso, de inmediato te lleva al concepto de, es
una prostituta, es promiscuidad, es banailización del sexo, banalización del
amor”, finalizó Omar Quintanar.
Laila se presenta en el
espacio Urgente número 2 del Foro Shakespeare todos los viernes a las 20:30
horas hasta el 17 de octubre.
espacio Urgente número 2 del Foro Shakespeare todos los viernes a las 20:30
horas hasta el 17 de octubre.
Imagen:
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