- El realismo mágico es una característica de las piezas del dramaturgo, quien también dirige el montaje
Distrito Federal, México, 12/06/14, (N22).- Tras una decepción amorosa
en Noruega, María, cansada de su vida, compra una extraña máquina que parece
estar embrujada. Le hace una petición: tener una doble que le ayude a enfrentar
los diarios pesares. A partir de esta anécdota, Alejandro Ricaño desarrolla El amor de las luciérnagas.
“Hay dos cosas que juegan
con la identidad en esta pieza. Una es buscar a su otra yo e impedir que le
roben la identidad y otra es que a lo largo de la historia también vamos viendo
pequeños flashbacks de partes de su vida, partes de la vida de María en donde
ella va construyendo su identidad, su primer amor, la muerte de su padre, cómo
conoce a su mejor amiga, cómo le va en la escuela, cómo se lleva con su familia
etc. Va construyendo ella una forma de ser, una identidad que después pierde y
después quiere recuperar”, comentó Sara Pinet, actriz.
con la identidad en esta pieza. Una es buscar a su otra yo e impedir que le
roben la identidad y otra es que a lo largo de la historia también vamos viendo
pequeños flashbacks de partes de su vida, partes de la vida de María en donde
ella va construyendo su identidad, su primer amor, la muerte de su padre, cómo
conoce a su mejor amiga, cómo le va en la escuela, cómo se lleva con su familia
etc. Va construyendo ella una forma de ser, una identidad que después pierde y
después quiere recuperar”, comentó Sara Pinet, actriz.
El realismo mágico es una
característica de las piezas del dramaturgo, quien también dirige el montaje.
característica de las piezas del dramaturgo, quien también dirige el montaje.
“Sobre las luciérnagas se
habla desde varios puntos, y uno de ellos que creo que es el más importante
además de a nivel visual, es que, para María, como un novio de su más tierna
adolescencia le describe algún día, el amor es intermitente es decir que hay
momentos muy felices pero son intermitentes y hay otros que son tristes o son
oscuros o son como más tranquilos, pero la vida vale la pena vivirla y el amor
también por esos momentos de luz intensa y de felicidad intensa”.
habla desde varios puntos, y uno de ellos que creo que es el más importante
además de a nivel visual, es que, para María, como un novio de su más tierna
adolescencia le describe algún día, el amor es intermitente es decir que hay
momentos muy felices pero son intermitentes y hay otros que son tristes o son
oscuros o son como más tranquilos, pero la vida vale la pena vivirla y el amor
también por esos momentos de luz intensa y de felicidad intensa”.
Con frecuentes momentos de
humor trágico, la obra cuenta también con una particular sensibilidad.
humor trágico, la obra cuenta también con una particular sensibilidad.
“A pesar de que la escribió
un hombre y la dirige un hombre, siento que esta obra es muy femenina, que
conjunta la poética con una estética muy particular que él utiliza a lo largo
de sus montajes y, con la música, visualmente, con la gama de colores que
utiliza, con la narrativa y los diálogos que le gusta también utilizar que se
hace como un montaje muy redondo, divertido, conmovedor”, finalizó.
un hombre y la dirige un hombre, siento que esta obra es muy femenina, que
conjunta la poética con una estética muy particular que él utiliza a lo largo
de sus montajes y, con la música, visualmente, con la gama de colores que
utiliza, con la narrativa y los diálogos que le gusta también utilizar que se
hace como un montaje muy redondo, divertido, conmovedor”, finalizó.
El
amor de las luciérnagas se presenta en el Teatro del Centro Cultural
Helénico todos los miércoles a las 20:30 horas hasta el 20 de agosto.
amor de las luciérnagas se presenta en el Teatro del Centro Cultural
Helénico todos los miércoles a las 20:30 horas hasta el 20 de agosto.
Imagen: http://bit.ly/UxJ3ii
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