Contemplación y activismo en Desert X

Esta gran exposición al aire libre busca evidenciar o hacer visibles los daños ambientales producidos por el cambio climático

 

 

Ciudad de México (N22/ Redacción).- ¿Quién dijo que no se puede visitar el desierto como experiencia estética? Para los incrédulos llega el festival Desert X que es una gran exposición al aire libre en el Valle de Coachella, en California.

La exposición mide 80 kilómetros y se conforma por 19 artistas que presentan esculturas con distintas referencias que van desde los derechos de los pueblos indígenas, hasta ensayos nucleares; sin embargo, el problema que quieren poner de relieve son los daños ambientales producidos por el cambio climático, que han afectado esta zona de forma directa.

Además, por la proximidad de Desert X con la frontera entre Estados Unidos y México, algunas piezas denotan la esperanza de los refugiados y el cruce de fronteras.

 

Una de las piezas es Specter, de Sterling Ruby, que contrasta el color sólido con la naturaleza del ambiente. Otras son Halter, de Eric N. Mack, artista de Nueva York que se dedica a trabajar con telas para proponer un espacio en movimiento y flujo.

Drive-In del colectivo Superflex es una pieza que pretende crear conciencia sobre el deterioro de los arecifes; Jackrabbit, Cottontail & Spirits of the Desert, de Cara Romero, expone espectaculares con fotografías de jóvenes indígenas de la tribu Chemehuevi para llamar la atención sobe estos grupos olvidados en los Estados Unidos.

Otras piezas son más atrevidas en su ejecución como Revolucion y margen de error, de Nancy Baker Cahill, ya que para verlas el espectador necesita descargar la aplicación 4TH Wall para apreciar este trabajo en realidad aumentada.